La ira, cólera, rabia, enojo o furia es una emoción que se expresa a través del resentimiento o de la irritabilidad. Los efectos físicos de la ira incluyen aumento del ritmo cardiaco, de la presión sanguínea o arterial, y de los niveles de adrenalina y noradrenalina.​ Algunos ven la ira como parte de la respuesta cerebral de atacar o huir de una amenaza o daño percibido.​ La ira se vuelve el sentimiento predominante en el comportamiento cognitivamente y fisiológico cuando una persona hace la decisión consciente de tomar acción para detener inmediatamente el comportamiento amenazante de otra fuerza externa.​ La ira puede tener muchas consecuencias físicas y mentales.

Esta emoción puede ayudarnos a salvar nuestras vidas en caso de emergencia extrema pero también puede meternos en problemas legales cuando agredimos a otras personas como consecuencia de nuestra falta de control de nuestro enojo. Lo importante es aceptar que la ira es una emoción que podemos aprender a controlar. En el Counseling Institute of Atlanta, contamos con un grupo profesional de expertos en el control del enojo. Podemos hacer una evaluación y establecer un programa terapeúticos para el control del enojo.